Se colocaba las puntas en los pies y se ponía a bailar al compás de la música, el tiempo se paraba, movía sus pies y su cuerpo casi sin si quiera notarlo, a la misma velocidad que las agujas se movían en el reloj de cuco que había en aquella pequeña sala, parecía que era una carrera a contrarreloj en la que cuando cantara aquel pajarito azul ambos volarían hacia el cielo cual gacela, aquel salto que tantas veces había practicado y que cada hora sincronizaba sin darse cuenta con aquel piar tan molesto del que ella ni si quiera se enteraba, podía pasarse las horas muertas golpeando con sus pies el suelo, porque nunca se cansaba, ya que para ella, el tiempo, no contaba.
/Laura\
#alejoveraimagenysonido
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